Reunida bajo el título 'Frágil', Cristina Almodóvar (Madrid, 1970) muestra su obra reciente en la galería Rina Bouwen de Madrid. Tras C I C L O S, su última exposición, donde reflexionaba acerca de la interacción entre hombre y naturaleza, y como continuación de esa vía de pensamiento, la autora se aproxima a la sensación de inestabilidad que le produce un entorno continuamente cambiante y sometido a multitud de fuerzas incontrolables. Y es esa fragilidad presente en la creación y en la destrucción el hilo conductor de esta exposición. De esta forma, el pensamiento inquieto de la autora se proyecta sobre las más diversas realidades naturales, fuentes de constante inspiración en su trabajo. Tanto el emerger de la vida como los movimientos telúricos se convierten en motivos para crear piezas de realización minuciosa que, bajo una suave apariencia, representan momentos de gran fuerza conceptual. Los contrarios se ... unen en esta muestra, en la que la vida emerge a través de la rotura, y el paisaje se quiebra para hacer presente la debilidad de lo aparentemente más sólido.

En esta ocasión, la actividad multidisciplinar de la artista se materializa en toda su diversidad. Delicadísimos dibujos a grafito de montañas comparten espacio con piezas de hierro, de pequeño formato y gran contundencia, que representan desprendimientos de rocas que arrastran la vida al caer. El papel también es empleado en otras piezas dándole dimensión escultórica, rompiéndose para dejar que eclosionen pequeñas mariposas, o sirviendo de alimento para las mismas, en piezas que evidencian otros aspectos de la fragilidad del mundo material, al modo de la 'Vanitas' barroca. Y la figura humana aparece por primera vez en su obra, como un elemento más inmerso en esta materialidad inestable que necesita trascender.