Desde que tengo memoria he pintado. Primero fueron dibujos copiados de viejos tebeos de mi padre, con caricaturas de personajes hoy de época, como "Anacleto Agente Secreto" o el "13 Rue del Percebe" - como suena -, y mas tarde creaba mis propias historias basadas en Mortadelo y Filemón, sin duda los dueños absolutos de mi infancia. La verdad es que siempre he sentido admiración por los grandes viñetistas de nuestro país - grandes artistas - y no se oculta en los cuadros que hoy firmo con otra edad, pero intentando no olvidar la inocencia que me transmiten aquellos años, sin duda esto último lo mas difícil de respetar.
De entonces también guardo, como pequeño homenaje al Carlos niño, la apariencia en mis personajes de 4 dedos en pies y manos, dado que es una característica común en los dibujos animados que tanto alimento han dado a mi imaginación. Todo ello...se mezcló en algún momento con el aprendizaje de los grandes maestros del siglo XIX cuyas historias, trágicas en muchos casos, dejaron huella impronta en su obra y a través de sus biografías, creo que también en la mía.
Con sus dificultades como ejemplo y las que yo mismo he encontrado en mi camino, he intentado forjar una personalidad propia en mi obra, caracterizándola de rasgos muy personales que sirvan de referencia para identificarla y que a la vez la diferencie del resto. La preocupación obsesiva por lo ornamental y banal de años atrás, pintando para complacer a la vista, ha dejado paso a temas mas profundos y complejos que para mí suponen las relaciones del individuo con su entorno. He encontrado comodidad en pintar personajes melancólicos y tristes, jugando con colores muy contrastados que incidan en representar un estado anímico en el que los personajes tocan fondo, se pierden. Pinto ese instante único, ese punto de inflexión en el que por delante solo queda reponer emociones y levantar el vuelo, utilizando contrastes de colores muy intensos, ángulos y perspectivas imposibles que acentúen, por un lado la inestabilidad del personaje y su entorno, y por otro la intensidad con que en estos momentos se manifiestan los cambios que marcan el rumbo de una vida.
Carlos Álvarez Las Heras
Entrada actualizada el el 07 abr de 2016
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